Las Fiestas Patronales de San Juan Bautista de Valentín poseen una gran tradición histórica ya que la elección del patrón de la localidad se debe a la influencia de la Orden de San Juan en estas tierras hasta el siglo XIX.

El origen de esta fiesta está ligado a la agricultura; en ellas se ofrecían las cosechas al patrón tras su recogida, dándole así las gracias por el fruto obtenido.

En la actualidad los vecinos del pueblo realizan ofrendas, celebran misas y pasean al Santo por todas las calles de la localidad.

Durante los cinco días previos a la onomástica del patrón comienzan los actos religiosos con la celebración en la Parroquia de un solemne quinario en su honor.

Estas fiestas tienen un complemento taurino en la tradicional corrida de vaquillas que se desarrolla entre las calles de Amancio Marín y La Doctora, muy cercanas a la plaza del pueblo. Las vías son acotadas con sólidas barreras de madera e hierro, formando una improvisada plaza y garantizando la seguridad y participación de naturales de Valentín y foráneos que se acercan hasta ella con motivo de este evento.

Las fiestas finalizan el día de San Pedro con una imagen del Santo en procesión por las calles de Valentín, acompañado por una banda de música.